En el actual proceso electoral de la entidad avanza más rápido la guerra sucia que las acciones positivas de las campañas. Las redes sociales como instrumentos de comunicación son llenadas de videos, fotografías y mensajes que logran el hartazgo social. Hay carencia de ideas, de propuestas serias y responsables como luz de esperanza para lo que viene. Los celulares están llenándose de mensajes descalificando a candidatos en campaña, nos llegan fotografías de visitas a mercados donde se ve a los candidatos degustando tacos, birrias, menudo o tortas y abrazando a hombres o mujeres de la tercera edad a sabiendas que son poses mediática que difícilmente se repetirán; Los medios de comunicación un día calificamos estas acciones con notas positivas y otras las reprobamos, por lo que no estamos siendo ajenos a lo que pasa, electoralmente hablando, al tomar partido, sin ser objetivos y justos.
El Instituto Estatal Electoral de Sinaloa se prepara para ejecutar los lineamientos que tienen como objetivo establecer la organización, logística operativa por la pandemia del covid-19, así como reglas y forma en que se efectuarán los debates públicos que por disposición legal están obligados a realizar los candidatos por la gubernatura, diputaciones y alcaldías.
Un debate para que cumpla con su cabal expresión, debe tener participantes con ideas antagónicas, inteligentes, capaces, con propuestas y programas. El primer debate por la gubernatura se dará el día 22 del presente mes. Los debates por venir brindan la oportunidad de que los electores conozcan de que están hechos los pretensos a gobernar Sinaloa, los municipios y saber quiénes son los mejores hombres o mujeres que nos representarán en el poder legislativo. Analizar su carácter personal, imagen, sus emociones, propuestas y la defensa de sus ideas y programas de acción. Es una buena oportunidad para formar criterios y decidir nuestro voto.
Ante la situación que prevalece en el Estado de Sinaloa en lo económico y social, el próximo gobernador, salga de la coalición PRI-PAN-PRD, de MORENA-PAS o de algún otro partido, debe de estar a la altura del reto que representa hacer frente a lo que se viene en materia de presupuesto, demanda de atención a la problemática del campo, corrupción y transparencia. Ser exitosos del manejo de las finanzas para lograr buenos resultados en políticas públicas y encauzar a Sinaloa por un nuevo sendero de convivencia, desarrollo y mejoramiento del nivel de vida.
Uno de sus principales retos tendrá que ver con el curso que tome la inseguridad pública desde el inicio del nuevo gobierno, siempre debe de ir por delante y no a la zaga como ha sucedido, porque será difícil reponerse a corto y mediano plazo. Quien gobierne la entidad los próximos seis años deberá ser preciso en su toma de decisiones, pero esencialmente en la obtención de resultados que den confianza a la ciudadanía para que esta se involucre y apoye las acciones gubernamentales.
Seguiremos insistiendo y tocando el punto con objetividad y mucha responsabilidad, de que quien llegue a gobernar Sinaloa y municipios, estarán obligados a rodearse de los mejores elementos que les ayuden a sacar adelante la tarea encomendada, no importando el grupo político que representen. No será fácil la confección de un equipo que llene todas las exigencias sociales, pero tendrán mucho tiempo para la búsqueda, evaluación y decisión.
Como antecedente y registro político-electoral, desde que se gestó la candidatura presidencial de ENRIQUE PEÑA NIETO, cuando era gobernador del Estado de México, se proyectó que el PRI gestara una nueva generación política. Ello con HUMBERTO MOREIRA, como líder nacional del PRI y el impulso de gentes nuevas en las candidaturas a las gubernaturas de Tamaulipas con TOMAS YARRINGTON, JAVIER DUARTE en Veracruz, ROBERTO SANDOVAL en Nayarit, ROBERTO BORGE en Quintana Roo, FAUSTO VALLEJO en Michoacán, CESAR DUARTE en Chihuahua y RODRIGO MEDINA en Nuevo León.
Todos ellos rompieron record en corrupción y vinculación con el narcotráfico, unos ya fueron procesados, otros están en proceso, pasando a formar parte de las estadísticas de las fugas. Contundentemente le fallaron al PRI, al país y a la política, aun así se nos invita a recuperar un país desmoronado en manos del pasado, sin comprender que México cambió y los reprendió en el 2018. Mientras que otros nos hablan de cambios y transformaciones que por la forma en que lo están haciendo cada vez causa más descontento, no convence a muchos y a otros les da igual, aunque miles de ciudadanos siguen el proyecto transformador del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR. En pocas palabras hay de todo y para todos.
El gran reto de MARIO ZAMORA GASTÉLUM es demostrar que es diferente a la generación que en el pasado gobernó al país. Por su parte, RUBÉN ROCHA MOYA, tiene la oportunidad de demostrar que nuestra generación no se mide por edades, sino por actitudes.