Después de la Revolución de 1910 los militares se disputaron el poder presidencial a través de generales, siendo el último MANUEL AVILA CAMACHO. La lucha por la silla presidencial llegó hasta el asesinato.
Al llegar al poder, El GRAL. PLUTARCO ELIAS CALLES le dio vida al PNR, con el fin de introducir cambios en el sistema político mexicano para evitar luchas estériles y conducir el rumbo de la nación bajo esquemas de competencia y oportunidades más democráticas. Con el arribo de civiles al poder el progreso del país no fue el esperado, se vivieron crisis económicas, impunidad y corrupción con un país desorganizado y azotado por la inestabilidad política.
En el pasado, la unión de tierras, poder y dinero originó hechos sangrientos; ahora la trilogía está integrada por dinero, poder y crimen organizado, provocando desintegración y debilitamiento del sistema político mexicano, en tanto que la globalización le abona a que los focos de desarrollo estén en función de intereses de los capitales internacionales que influyen en la nueva distribución geopolítica que ayuda a la concentración del poder.
Cada gobierno enfrentó sus circunstancias con visión propia: A veces se generaron situaciones de severo enfrentamiento social; en otras ocasiones la economía nacional atravesó por coyunturas críticas y en otros casos se hizo manifiesto, en algunos grupos, el riesgo de debilitamiento de los propósitos de la revolución mexicana. A pesar de todo esto ahí vamos de nuevo “disque montados en la 4T”.
El presidente LÓPEZ OBRADOR se juega el todo por el todo en materia política-electoral, con el temor de que su proyecto “transformador” (sustentado en reformas, caprichos y programas sociales) se venga abajo al término de su período gubernamental. Por ello juega su sucesión presidencial con pocas cartas de la baraja política: usa las mañaneras para informar, desacreditar y avanzar.
En la Fiscalía General de la Nación, tiene a un incondicional en la figura de ALEJANDRO GERTZ MANERO, quien clasifica expedientes por lo que se pueda ofrecer; con la UIF tiene el instrumento legal para combatir los delitos de operaciones con recursos de procedencia que pueden acalambrar a cualquiera.
Los poderes facticos se mueven en torno al poder y jamás estarán con el perdedor. ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, cuenta además con el control de 20 gobernadores, alcaldes, diputados y senadores de MORENA y aliados. Lo que le permite elegir sucesor con todos los riesgos que esto implica, ante una oposición dividida, mal organizado y con figuras poco atractivas electoralmente hablando.
AMLO requiere lealtad e incondicionales que le permitan estar detrás del poder, como lo hizo en su momento PLUTARCO ELIAS CALLES (quien después de dejar la presidencia siguió influyendo sobre los presidente EMILIO PORTES GIL, PASCUAL ORTIZ y ABELARDO L. RODRÍGUEZ). En este proyecto encajan CLAUDIA SHEINBAUM y ADÁN AUGUSTO LÓPEZ, no hay más, y muy probablemente con ellos jugará la sucesión del 2024.
MARCELO EBRARD se juega también su futuro en un segundo intento por ser candidato, pero todo parece indicar que no está en el ánimo del inquilino de palacio nacional. A MARCELO lo tiene bien agarrado con expedientes comprometedores, pero podría ser Senador, presidente de MORENA o Secretario de Gobernación. En el juego sucesorio hay muchos intereses políticos, económicos y poderes fácticos que le entienden muy bien a “la democracia”. Ellos siempre estarán con el ganador y no con el perdedor.
En Sinaloa están de moda las traiciones, los golpeteos políticos y la polarización. El choque ROCHA MOYA-CUÉN OJEDA, era un tiro que se veía venir entre dos personalidades de carácter fuerte y diferentes ideologías ¿Por qué se aliaron en el 2021? ¿De dónde salieron los recursos para costear campañas electorales por la gubernatura, alcaldías y diputaciones? los intereses de las dirigencias nacionales de partidos le abonan al descredito de la política, al chantajearse unos con otros por el control de sus dirigencias en los Estados, mientras que sigue el juego de las alianzas donde se junta basura con aceite. El conflicto generado por la designación de delegados de MORENA, habla del canibalismo que se vive por el poder. En pocas palabras, la política se comercializa al mejor
postor, mientras que el gran perdedor es el pueblo.