Después de dos guerras mundiales devastadoras jamás imaginamos que en pleno siglo XXI seríamos testigos de un conflicto bélico que pudiera generalizarse mundialmente, al imponerse la voluntad del más fuerte (Rusia), quien bajo amenazas de opresión y dominación invadió sin ninguna contemplación a sus vecinos de Ucrania. Esto Obliga a las grandes potencias a emprender un proceso profundo de modernización política, diplomática y económica que los prepare para los grandes desafíos del futuro a través de la negociación diplomática, de apoyos financieros y diversas sanciones en contra de los países agresores.
Ante la gran transformación que está viviendo el mundo y las nuevas presiones al ejercicio de la soberanía de México, surgen voces encontradas que invitan a reflexionar sobre la conducción de nuestra política exterior. El mundo entero está tenso por el conflicto Ucrania-Rusia y se pierde el equilibrio global al medir fuerzas dos potencias mundiales y sus aliados: Estados Unidos de Norteamérica y Rusia. Mientras que el gobierno mexicano juega a la diplomacia aparentando batear con la derecha cuando en realidad lo hace con la izquierda, tratando de no lastimar la relación con quien estamos unidos en matrimonio (Estados Unidos de Norteamérica) cuando somos amantes de Rusia, China, Venezuela, Nicaragua y Cuba.
Las indefiniciones en materia de política exterior traen repercusiones en lo político y económico a corto y mediano plazo. Ser vecinos de un país fuerte y poderoso como Estados Unidos, implica beneficios, pero también genera compromisos de gran calado. El ejercicio moderno de la soberanía descansa en un nacionalismo democrático y transformador que lleve a México a un espacio propio y con voz reconocida ¿lo entenderán así nuestros diplomáticos?
La soberanía no solo es la defensa de la integridad territorial con bonitos discursos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, de Palacio Nacional o diferentes voces que hacen alarde de patriotismo y defensa de países oprimidos como Ucrania. El ejercicio moderno de la soberanía implica también asegurar de manera efectiva y permanente la política del Estado frente a la competencia de los demás Estados, la vigencia del derecho de sus ciudadanos basado en justicia y seguridad.
La soberanía exige una inserción eficaz en los mercados internacionales que ensanche los márgenes de acción, propiciando nuevas oportunidades tecnológicas, comerciales y financieras, y gran confianza a inversores para que ayuden a impulsar la economía, generen fuentes de empleo y ayuden al Estado con aportaciones fiscales. Ojala que el conflicto entre Rusia y Ucrania sea un problema regional y no se convierta en un pretexto para comenzar la tercera guerra mundial.
REVOLTURA POLÍTICA
No cabe duda que México es único. Aquí se pueden robar y desviar millones de pesos en recursos públicos con toda impunidad y solo queda en escándalos mediáticos politizados, pero de ahí no pasa. . . La política se convirtió en un circo donde abundan los cínicos, los trapecistas y los payasos. El chantaje electoral está de moda y “los chaqueteos” ideológicos son el menú de todos los días. . . La violencia gana espacios en todo el territorio nacional, pero hay que responder con “abrazos y no con balazos”. . . En días pasados el puerto de Mazatlán se convirtió en un reflector nacional, y no por los dimes y diretes para decidir las fiestas del carnaval, sino por la visita del Dirigente Nacional de MORENA, MARIO DELGADO CARRILLO, quien mandó un mensaje claro y certero a quienes gobiernan bajo las siglas de este partido en Sinaloa, al manifestar que en MORENA no puede haber conflictos entre sus integrantes, debe imperar el dialogo, toda vez que los gobiernos emanados de esté partido no deben perder su vocación social porque ello los distingue y los hace diferente a los demás. Solo le faltó recordarles el “no mentir, no robar y no traicionar” por aquello de que se les pueda olvidar ¿Para quién o para quiénes iba dirigido este dardo envenenado? . . . Los resultados de la elección de la nueva dirigencia de la Sección 53 del SNTE, favorecieron a la planilla naranja dando el triunfo a RICARDO MADRID, del equipo de DANIEL AMADOR. En esta contienda además de la lucha por el poder y la medición de fuerzas, también imperó el orgullo, la soberbia, el enojo y la creencia de que se gana todo. Por lo pronto perdió el equipo que comanda el Gobernador ¿Qué sigue?