Las posiciones entre los partidos políticos y los gobernantes a veces resultan abismales. En la mayoría de los casos impera la mediocridad, las verdades a medias, la impunidad y la demagogia. Es indudable que la sociedad tiene una gran responsabilidad sobre lo que pasa en un país como el nuestro, toda vez que tenemos una memoria muy corta y rápidamente olvidamos los abusos que cometen los servidores públicos ¡y ahí vamos de nuevo!
Estamos siendo testigos de dos corrientes políticas opuestas que luchan entre sí. Una por mantener la gubernatura (PRI, PAN y PRD) que se apoya en la imagen y resultados de gobierno de QUIRINO ORDAZ COPPEL y otra bajo la sombra de MORENA que busca consolidar el proyecto transformador del Presidente LÓPEZ OBRADOR. Ambas se disputan la plaza con uñas y dientes.
México sigue careciendo de una real democracia, de una auténtica separación de poderes y de una economía fuerte sustentada en la inversión. Lamentablemente seguimos dando palos de ciego basadas en el subdesarrollo político. Es indiscutible que la política es usada para dividir, tranzar, manipular, lastimar y distanciar amigos como está sucediendo en la actualidad.
A pocos días de la elección, las lecturas que se marcan como asignaturas políticas de este proceso electoral que iniciará su veda el 3 de junio son las siguientes: imperó la guerra sucia, se careció de civilidad política, la tolerancia y el respeto entre los candidatos fue nula, faltaron propuestas sustentadas en las realidades que nos aquejan, no hubo definiciones sobre las potencialidades que tiene Sinaloa, así como su aprovechamiento. En pocas palabras se dejaron muchas preguntas sin respuesta.
El Candidato por la gubernatura RUBÉN ROCHA MOYA de MORENA-PAS, se reflejó como un hombre sensible que se presta al dialogo, apegado a su familia y con ganas de demostrar que la edad no es un impedimento para gobernar con madurez, equilibrio y capacidad. De perder la elección, no tendrá otra oportunidad por los años en contra. Como puntero por la gubernatura fue objeto de fuego amigo y enemigo para derrumbarlo del primer lugar en las preferencias electorales. Por otra parte la sentencia del TEPJF en contra de las candidaturas de LUIS GUILLERMO BENITEZ en Mazatlán y JESÚS ESTRADA FERREIRO en Culiacán, afecta a los candidatos por las alcaldías y al PAS, no así al candidato por la gubernatura.
Si ROCHA MOYA obtiene el triunfo, gobernaría con un escenario complicado en lo económico, político y social. Es importante resaltar que los tres primeros años de administración tendría todo el respaldo del gobierno federal, y según sus propias palabras su prioridad sería una mayor atención al campo y concretización de las presas Picachos y Santa María, así como las carretera Badiraguato-Parral y Choix-Chihuahua, complementando con programas sociales, empleo, servicios públicos y combate a la impunidad e inseguridad. Los tres años restantes dependerán de lo que suceda en la elección presidencial del 2024.
MARIO ZAMORA GASTÉLUM de la coalición “Va por Sinaloa”, está convertido en un huracán político que se mueve de un lado a otro por toda la geografía sinaloense. Es poseedor de una gran experiencia administrativa, tiene juventud y en su haber hay derrotas políticas que han templado su carácter. Su éxito dependerá de la estructura partidista y del voto de los sinaloenses. De ganar la elección por la gubernatura podría tener en contra los apoyos federales al pertenecer al viejo PRI, ese partido al que LÓPEZ OBRADOR culpa de todos los males que padece el país. La prioridad del PRI y de sus aliados también sería la sucesión presidencial del 2024, pues de no atinarle se le complicaría más a la entidad y con ello se derrumbarían varias propuestas y compromisos de campaña electoral. Si MARIO ZAMORA llegara a perder la elección, su futuro político no se estancaría pues tiene juventud, preparación y mucho que aportar a su Estado.
HECTOR MELESIO CUEN OJEDA, sin estar en las boletas electorales tiene una gran influencia en el proceso por la gubernatura. Es considerado un ave de tempestades, etiquetado como hombre hormiga para organizar y trabajar. Ganó la sucesión rectoral en la UAS, pero también tiene marcados negativos. El éxito electoral del PAS dependerá de la habilidad de CUEN para reponerse del golpe jurídico que le asestó el TEPJF, de la estructura partidista y de que la clase universitaria le ayude a interesar al electorado, mismo que cada vez es más desconfiado y exigente.
Los augurios de la alianza “MORENA-PAS” no son muy buenos, todo apunta a que ganen o pierdan la gubernatura su sociedad no durará mucho, pues HECTOR MELESIO CUEN es un hombre ambicioso que presiona demasiado para jalar agua a su molino y ROCHA MOYA difícilmente cederá posiciones claves que ocupa para gobernar con equilibrio político.
Las reglas del juego sucesorio cambian escenarios y mueven las fichas del tablero político. Estamos muy cerca de conocer el veredicto final del electorado ante campañas que alejaron amigos y fueron generadoras de violencia política.