El presidente AMLO sigue atento y monitoreando para elegir al merecedor de su confianza con la candidatura presidencial, ese que le cuidará y continuará con la 4T. De ser posible quiere una persona manipulable, como en su tiempo lo hizo PLUTARCO ELIAS CALLES, para ensayar un nuevo Maximato.
Desde ese punto de vista, El ideal pudiera ser su viejo amigo y paisano ADÁN AUGUSTO LÓPEZ HERNÁNDEZ, actual Secretario de Gobernación, quien además es el más tapado de los destapados, no tiene señalamientos de corrupción, parece libre de compromisos de otra naturaleza y está comprometido con su jefe y amigo, ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
Como es usual en el régimen mexicano, desde que inicia la administración se empieza a especular sobre los posibles sucesores del presidente, una vez que éste concluya su mandato. Varios son los mencionados y por supuesto también se barajan los nombres de algunos personajes “corcholatas” que solo sirven de relleno en este juego democrático y de altos intereses. Sin embargo, AMLO abrió la puerta grande del poder al verdadero tapado, su viejo amigo e incondicional colaborador en las buenas y en las malas ADÁN AUGUSTO LÓPEZ HERNÁNDEZ.
El presidente tiene la intención de hacer sentir su peso y juega con sus otras dos “corcholatas” (MARCELO Y CLAUDIA), mientras que a otros, como RICARDO MONREAL, los pone contra las cuerdas y los exhibe como hombres que no tiene su confianza. Por esto y otras cosas que están sucediendo en el país no debemos asustarnos inútilmente por desplantes verbales, por radicalismos de palabra y por pirotecnia ideológica. Debemos ser crudos y consientes. Al proceso electoral del 2024 llegarán como candidatos nuevos mesías con falsas promesas de bienestar y con deslices verbales que cuestan caro y matan esperanzas.
Como anécdota (Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia): el presidente GUSTAVO DÍAZ ORDAZ, equivocó su dedo sucesorio con la designación de LUIS ECHEVERRÍA, quien como presidente se puso a acelerar cambios y reformas que reactivaran los procesos de crecimiento. Sin embargo, la forma en que enfrentó las necesidades del país resultó funesta para él y para todos.
En su ceremonia de toma de protesta LEA pretendió mostrar una suerte de “ruptura y continuidad”. En su primer mensaje a la nación dejó clara su voluntad de distanciarse de la administración anterior y reiteró los temas de campaña “acercamiento con los jóvenes, dialogo, apertura, critica y autocritica” también reconoció la injusta distribución de la riqueza y expuso la necesidad de cambios que nunca llegaron.
Desde un principio, ECHEVERRÍA enarboló como modelo a LÁZARO CÁRDENAS, por tanto, para mitigar la nostalgia de los tiempos en que estuvieron de moda la ropa, las artesanías y todo lo mexicano, dispuso que en las comidas y celebraciones presidenciales en vez de vinos y licores se sirvieran aguas de chía, de horchata o Jamaica. ECHEVERRÍA nunca paraba de hablar y de emitir estentóreas carcajadas, le gustaba tener mucho público y con frecuencia citaba en la mañana a grupos numerosos de funcionarios de varias dependencias para tomar acuerdos colectivos.
En Sinaloa, a escasos 8 meses de su administración, pareciera que el gobernador RUBÉN ROCHA MOYA, también pone de moda el juego sucesorio del 2027, tal vez siguiendo el ejemplo de Palacio empieza a montar “el baile de las corcholatas”, sin entender que con ello se distrae del quehacer gubernamental, divide, maquilla la realidad, cae en desgaste gubernamental y se incrementan los golpes bajos.
En su tiempo como gobernadores ALFONSO G CALDERÓN, ANTONIO TOLEDO CORRO, RENATO VEGA y JUAN S. MILLÁN fueron celosos del poder, lo ejercieron hasta el último día de sus mandatos y mantuvieron a raya a todo aquel que quisiera adelantar la sucesión gubernamental en Sinaloa.
Lo más recomendable sería, que todo aquel servidor público que busque alguna candidatura al senado, ceda su lugar a otra persona que pueda atender al 100% su responsabilidad o en todo caso esperar los tiempos marcados por la ley. En la actualidad la mayor parte de la población sinaloense no parece muy interesada en cuestiones políticas-electorales; más bien se encuentra preocupada por los altos índices de inseguridad, los
feminicidios, homicidios, la sequía y los problemas económicos que no dan tregua. Es momentos de decir NO a la política tempranera, NO al fácil halago y NO a las falsas promesas que dicen si pero no dicen cuándo.