Cuando se dan las sucesiones gubernamentales, por razones naturales los gobernadores que están por entregar su responsabilidad necesitan y desean dejar sucesor, esto como un complemento a lo que hicieron y dejaron de hacer. Otras veces, lo hacen por intereses personales, grupales o circunstanciales.
Por ello, no es extraño que en Sinaloa se analice si el Gobernador QUIRINO ORDAZ COPPEL, está interesado en promover sucesor a modo y si lo podrá hacer, por las circunstancias en que se encuentra con un presidente de ideología diferente al PRI. Ante esto, la gran interrogante es si lo más conveniente para él es promover su propia sucesión o jugar bajo la línea presidencial.
Las reglas del sistema político mexicano son claras y poco han variado a lo largo de todos estos años, sin que importe si está gobernando el PRI, PAN o Morena; es decir, las grandes decisiones políticas las toma el Presidente de la República en turno. Así que no hay que quebrarse la cabeza. Ahora hay que esperar las condiciones en que estará el país y la imagen presidencial.
La historia de las decisiones políticas en Sinaloa son ricas en experiencias, estrategias e impactos. Recordemos que LEOPOLDO SÁNCHEZ CÉLIZ, para proteger su salida del gobierno trabajó la integración de una terna para sucederlo conformada por MIGUEL LEYSON PEREZ, AMADO ESTRADA RODRÍGUEZ y ALFREDO VALDEZ MONTOYA. Del centro apoyaban al General RENATO VEGA, pero logró sacar adelante a VALDEZ MONTOYA. Sin embargo, a este no lo dejaron ni siquiera integrar su propia terna aunque promovió al DR. MARIANO CARLÓN y a ERNESTO ORTEGÓN, pero FIDEL VELAZQUEZ les comió el mandado con ALFONSO G. CALDERÓN.
Siendo gobernador CALDERÓN y Presidente de la República JOSÉ LÓPEZ PORTILLO, se dio una de las luchas más intensas por la sucesión gubernamental en Sinaloa. El Gobernador se sentía muy seguro por su obra de gobierno y con el apoyo de FIDEL VELAZQUEZ, trató de dejar sucesor jugando con la terna de LÁZARO RAMOS ESQUER, ERNESTO CEBREROS Y OSCAR ORRANTIA. Pero ANTONIO TOLEDO CORRO, tenía una vieja amistad con LÓPEZ PORTILLO, además de otros compromisos personales, y siendo Secretario de la Reforma Agraria hizo sus movimientos para restarle poder a CALDERÓN, queriéndole quitar el control de la dirigencia de La Liga de Comunidades Agrarias, la lucha se dio, se desgarraron las vestiduras y aunque CALDERÓN ganó el control campesino, perdió su sucesión con TOLEDO.
Las reglas no cambiaron con TOLEDO y promovió su sucesión con ERNESTO MILLÁN ESCALANTE, quien ya se sentía gobernador, toda vez que no veía contrincante fuerte, todo porque el único sinaloense encumbrado era FRANCISCO LABASTIDA OCHOA, quien fungía como Secretario de Energía y no pretendía ser gobernador. Pero el grupo político que rodeaba a CARLOS SALINAS, tuvo la fuerza necesaria para debilitar al grupo de ALFREDO DEL MAZO (quien se perfilaba como oponente de SALINAS por la candidatura presidencial para suceder a MIGUEL DE LA MADRID) siendo sacrificado LABASTIDA y enviado como candidato a gobernador de Sinaloa, dejando a TOLEDO y MILLÁN ESCALANTE desconcertados.
Posteriormente, LABASTIDA acarició la idea de dejar sucesor porque aprobaron su terna integrada por GUSTAVO GUERRERO, LAURO DIAZ CASTRO y RENATO VEGA ALVARADO. Pero el gran error de LABASTIDA, fue querer dar un madruguete e hizo un mini-destape antes de tiempo de LAURO DÍAZ CASTRO, el Presidente SALINAS no lo perdonó y le mandó como candidato a RENATO VEGA ALVARADO.
RENATO VEGA no se preocupó por dejar sucesor, dejó libre la pista por lo que LABAST.DA como Secretario de Gobernación buscó la revancha con LAURO DÍAZ CASTRO, mas no contaba con la astucia y habilidad política de JUAN S. MILLÁN, quien le pidió piso parejo al Presidente ERNESTO ZEDILLO, con un proceso interno, porque estaba seguro de contar con el apoyo de las bases priistas, y así fue, no se equivocó, ganó la elección interna y posteriormente la constitucional.
A JUAN S. MILLÁN la fortuna política lo siguió acompañando porque su sucesión le tocó con un Presidente de la República de filiación panista y eso le dejó el camino libre para que JESÚS AGUILAR PADILLA lo sucediera con el compromiso político de mantener el poder a favor del grupo. Sin embargo, este no cumplió y le tronó.
AGUILAR PADILLA, también tuvo la coyuntura de que el Presidente de ese entonces no era priista y eso le dio la opción de decidir su propia sucesión. Se la jugó con todo a favor de JESÚS VIZCARRA CALDERÓN, pero JUAN S. MILLAN, le cobró la factura apoyando las aspiraciones de MARIO LÓPEZ VALDEZ. El resto es historia.
Como se ve, hay episodios interesantes en cuanto a las sucesiones, pero también indicadores muy precisos para no equivocarse. JUAN S. MILLÁN, es el único gobernador sinaloense que pudo dejar sucesor y trascender como un político experimentado y respetado, está retirado de la política activa pero aún sigue vigente y muy cerca de los centros del poder.
Ahora hay que esperar como se operará la sucesión de QUIRINO ORDAZ COPPEL, ante las nuevas circunstancias políticas ¿Con quién la jugará el gobernador?, ¿Se replegará a la indicación presidencial?
Por MORENA va corriendo muy de prisa el Senador RUBÉN ROCHA MOYA; en el PAN, siguen sin dar color; el PAS, busca el amor de MORENA; GERARDO VARGAS LANDEROS, no quita el dedo del renglón; MARIO ZAMORA, levanta la voz y dice aquí estoy; SERGIO TORRES, está con el chinchorro puesto; AARON IRIZAR se observa puesto y dispuesto; mientras que JUAN ALFONSO MEJIA, sigue tomando clases a distancia.